Amelinha y Belinha son dos hermanas nacidas y criadas en el interior de Pernambuco. Las hijas de padres campesinos supieron desde el principio como afrontar las feroces dificultades de la vida rural con una sonrisa en su rostro. Con esto, estaban alcanzando sus conquistas personales. La primera es una consejera auditora de finanzas públicas y la otra, menos inteligente, es una profesora municipal de educacion básica en Arcoverde. Aunque sean felices profesionalmente, ambas tienen un serio problema cronico con respecto a las relaciones porque nunca encontraron su príncipe encantador, que es el sueño de toda mujer. La mayor, Belinha, vino a vivir con un hombre por un tiempo. Sin embargo, fue traicionada lo que genero en su pequeño corazon traumas irreparables. Se vio obligada a separarse y prometio no volver a sufrir por culpa de un hombre. Con eso, los dos se rebelaron y comenzaron a tratar a los hombres como juguetes.