El texto que va usted a leer ofrece una interesante perspectiva de investigación operacional -un estudio comparativo de casos similares- para estudiar un fenómeno complejo: la descentralización participativa. Lo hace con el fin de de enriquecer las perspectivas politológicas más difundidas, referidas principalmente al despliegue de los proyectos nacionales de descentralización. Aquí, en cambio, se comparan países entre sí, territorios entre sí y territorios entre países. Un esfuerzo notable, que debiera continuarse y complementarse. Compara territorios de dos países, Uruguay y Chile, que se parecen en algunos aspectos, pero difieren sensiblemente en los dos aspectos considerados: el proceso de descentralización y la institucionalidad de la participación, como componentes de los proyectos políticos nacionales. Ambos son países tradicionalmente centralizados y se asemejan en el bajo porcentaje de gasto fiscal descentralizado. Pero en Chile existe una estructura municipal centenaria. Precisamente en ese nivel, municipal, recayó la principal medida descentralizadora de la dictadura militar chilena, inserta en el proyecto neoliberal de desmantelamiento del Estado central: el traspaso de la administración de la salud primaria y la educación básica y media a los municipios. En Uruguay, en cambio, los municipios fueron creados recientemente, como parte de un proyecto descentralizador y participativo.