El Tratado de la Pintura es una recopilación póstuma de notas y reflexiones de Leonardo da Vinci sobre el arte pictórico, elaborada a partir de sus cuadernos. La obra aborda la pintura como una ciencia que combina observación, conocimiento anatómico, perspectiva, luz, sombra y proporción. Incluye consejos técnicos para representar con realismo el cuerpo humano, la naturaleza y el movimiento, así como reflexiones filosóficas sobre la importancia de la pintura frente a otras artes. Su objetivo es enseñar a los pintores a observar la realidad con precisión y a plasmarla de forma armoniosa y veraz.