Hemos complicado demasiado el estudio del Pasado, dando mayor importancia a puntos de vista, intereses nacionalistas, religiosos y morales, que colocan el hecho histórico en segundo lugar, subordinado al interés del sistema que pretende educarnos. Llegó la hora de simplificar y demostrar respeto hacia nuestros ancestrales, esforzándonos en conocer lo que realmente sucedió en el pasado, y no apenas aquello que el sistema pretende informarnos. Después de tantos años estudiando Historia, llegué a la conclusión de que la mejor forma de conocer el pasado es a través de una Cronología imparcial, objetiva, que se limite a colocar cada acontecimiento en su exacto lugar en el tiempo, revelando la Historia sin manipulaciones ni medias verdades. Esta Cronología constituye el más completo material de consulta, no apenas con hechos puramente políticos, como fundación de ciudades, nacimiento de reinos e imperios, descubrimientos científicos y geográficos, desastres naturales y epidemias, sino también conteniendo informaciones sobre los más diferentes campos de la actividad humana: química, astronomía, geografía, matemáticas, etc. De forma paralela, la cronología es complementada por datos que no pertenecen a una fecha determinada, sino a toda una época, son generalidades de cada sociedad, curiosidades, costumbres, la religión de cada civilización, inventos sin fecha exacta, etc. El resultado de todo este conjunto es una de las más completas cronologías existentes, periódicamente actualizada con los últimos descubrimientos arqueológicos y científicos. Una obra de esta magnitud no podría ser publicada en un único libro, por eso la he dividido en varias colecciones, y los originales en español están siendo traducidos para francés, inglés y portugués. La cronología transcurre año a año, dentro de lo posible, desde la prehistoria hasta la actualidad. Para aquellos que prefieren un estudio más profundo y detallado, he preparado una segunda cronología, día a día, que abarca desde 1789 hasta 1946, dividida en cuatro colecciones.